Sinceramente,
creo que nos están contando muchas
milongas. Si encendemos la televisión nos asombra la cantidad de mensajes
que generan una única emoción: el miedo. Así que de alguna manera, hay alguien o alguienes empeñados en que
tengamos miedo. Miedo significa no confiar, no crecer, no salir de mis
propias seguridades. Y cuando mato mi
seguridad en realidad lo que estoy haciendo es destruir mi propia creatividad.
Evidentemente,
ésta es otra de las milongas que nos cuentan cada día, que la creatividad está
en posesión de unos pocos genios, pero la
creatividad es una opción, no un factor de personalidad. Dicho de manera
sencilla: todos tenemos el poder de la creatividad, el poder de ser nosotros
mismos.
Así,
que ni más ni menos, la creatividad es
una cuestión de conexión. Conexión con mi propio poder personal. Pensándolo
bien, no hay nada más hermoso que un ser humano plenamente inmerso en una
actividad que le apasiona y le hace único.
Problema,
hay alguien o alguienes que nos intentan
demostrar cada segundo que tenemos que ser un algún otro determinado. Aquí
no hay consenso posible. O te sacudes de encima los clichés y te decides a ser
quien verdaderamente eres o sigues el camino que otro marcó para ti. Y aquí no
existen medias tintas. O eres tú o eres una sombra caricaturesca de otro.
¿Cuánto tiempo invertimos en ser como ese, o aquel o el de más allá? ¿Cuánto
gastamos en parecernos al modelo o la modelo de turno? El único modelo
existente eres tú. Porque desde que el mundo es mundo ninguna gota de agua es
idéntica a ninguna otra, ninguna.
Pensemos
en lo absurdo que sería acercarnos a un pantano, escoger una gota de agua al
azar y comparar los otros millones por su parecido estético. ¿Alguien mira la
estética cuando bebe un vaso de agua?.
Te
propongo un sencillo ejercicio: Cierra los ojos, respira profundamente, cuatro,
cinco veces. Lleva tu atención al centro de tu estómago mientras respiras a tu
ritmo, dejando que cualquier otra cosa quede fuera de tu atención. Visualiza
una persona que habita exactamente en tu estómago, pregúntale que quiere y cómo
puede llevarlo a cabo. Es más que probable que te sorprenda la respuesta.
Ahí,
justo en el centro de tu ser reside tu
fuerza, tu acción, tu poder y tu creatividad. Ahí está lo que te hace único
e imprescindible.
¿Por
qué esforzarnos en ser quienes no somos cuando podemos dedicarnos a ser quienes
somos realmente? Ciertamente es un esfuerzo que merece mucho más la pena.
Y
si todo está conectado, que lo está, cuando
te decidas a expresarte descubrirás que hay muchos otros que necesitan lo que
tú puedes aportar, muchos otros que te ayudarán a que puedas expresar la
esencia de quien realmente eres, muchos otros que incluso estarán dispuestos a
pagar por tus habilidades y muchos que estarán deseosos de que les enseñes lo
que aprendiste o que puedan enseñarte lo que necesitas aprender cada instante.
Pero
la televisión no habla de esto, los periódicos no quieren saber nada de ello, la
radio prefiere seguir ofreciéndonos miedo, porque hay alguien o alguienes que
no quieren que nos descubramos. Prefieren
guiar un hatajo de corderos obnubilados que enfrentarse con un conjunto de
seres libres, confiados y confiables. Por eso nos atosigan con el miedo,
con la crisis, con la guerra y la enfermedad. Por eso nos impiden ser y nos
bombardean con el tener.
Pero
hay una verdad más profunda que el próximo modelo de Armani: no hemos venido
aquí a sufrir. La vida es vida, no
sufrimiento. La vida se acaba, sí y conviene tenerlo presente, por eso hay que
escoger muy bien qué queremos hacer con ella. Y puesto que tengo unos días
limitados, prefiero pasarlos expresando quien soy, porque aunque la portada del
Newsweek, o mi pareja, o mi madre, o mi padre o mi jefe digan lo contrario, yo
soy. Yo soy la única y por lo tanto la mejor versión de mí mismo.
Comprometerse
con la vida es comprometerse consigo mismo, ser la mejor expresión posible de
mí, ser la creatividad de mí mismo.
No necesito seguir modelos,
no necesito pintar palotes en un papel si lo que quiero es leer. Yo soy. La máxima, la única e irrepetible versión
de alguien que no hubo ni habrá, así que basta de excusas, voy a trabajar en
ser yo mismo.
Feliz
y creativa semana para tod@s
EDU