¿SE PUEDE HACER UNA TESIS DOCTORAL SOBRE EL HUMOR POÉTICO DE GLORIA?

La respuesta es sí y de más de 500 páginas, toda una proeza de paciencia, humor y poesía variopinta donde la haya, como Gloria. Me encontré con este documento y pensé pero qué fue de aquellas poesías, que ahora suenan a lo lejos de mi memoria de la más tierna infancia. Cancioncillas pegadizas de una abuela con voz ronca y chaleco, siempre envuelta en humo de cigarrillos ducados, y que leía con la armonía musical de un querubín jubilado.  Me pregunto ahora, que querían transmitir aquellas poesías infantiles como esta:

                                       “Un globo, dos globos, tres globos,
el mundo es un globo donde vivo yo”

Pensando ahora es una poesía matemática, y no es broma pues está catalogada como tal, al igual que:

Cuéntame un cuento de números,
háblame del dos y el tres
—del ocho que es al revés
igual que yo del derecho—.

Cuéntame tú qué te han hecho
el nueve, el cinco y el cuatro
para que los quieras tanto;
anda pronto, cuéntame.

Dime ese tres que parece
los senos de cualquier foca;
dime ¿de quién se enamora
ese tonto que es el tres?


“La oda sigue, pero si sigo leyendo, la oda será mi tormento”, ja ja ja veis amigos, esto es lo que pasa cuando lees algo  culto, pero a mi me da por reír y pensar, pero qué coño fumaba Gloria, ¿enserio ducados? Porque a quién se le ocurriría dedicar una poesía a la mosca mediterránea, esa que se posa sobre tu barbilla a la hora de la siesta, o la que revolotea alegremente junto a sus compañeras en el centro de la casa en una tarde de verano.



La mosca mediterránea
                                                     (ceratitis capitata)
 procrea en el naranjal.

En Alcira y en Angola,
y en el señor que cruza
y en aquella damisola,
                                                    en usted que me sonríe,
y aquí en una servidora;
        que bien se puede comprobar
                la existencia de “Tristeza” virocal
                                                    que amenaza el litoral.


Para terminar, os deleito con la siguiente, en un intento de realizar mi pequeño homenaje a esa abuelita poetisa que tan ricamente dedicaba sus versos, algunos de carácter social, con un toque naif pero de estilismo encontrado.

El cotorro de cacorro

(Ya llegados aquí, se podría cambia la “c” de este inocente título por una “p” y convertirla en una poesía de categoría X,  propia de los años del destape español).

El cotorro de Cacorro
nació en Madrid,
hijo de una cotorra
de Guayaquil.
La dueña del cotorro
de Cacorro
le cortó las uñas
y le hizo un gorro.
El cotorro de Cacorro
era de lo que no hay,
decía:
Contra lo "chungo"
lo "guay".
Contra lo "chungo"
lo "guay".
Así lo dijo,

Gloria Fuertes

M. G. D.
33 años
Granada

1 comentario:

  1. Mil Gracias MGD había olvidado lo que esta buena mujer hizo por mi, por mi imaginación y por hacernos sentir bien a aquellos que crecimos con el Sabadabadá, el cajón desastre, y la cometa blanca...

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